Wednesday, December 09, 2009

Baladí

Ya hubo Crème Brûlée, ya hubo crepas de todos estilos, ya hubo postres y también una que otra delicia salada, y ahora llega el invierno y la cocina se llena de clavo y nuez moscada. Lo que sigue son cientos estrellas bien horneadas. Astros no tan pequeños y de color bronceado, unas más que otras. Lo que llama la atención es que, a pesar de la vainilla, no ha habido ni una sola peca, lo que hay ahora son lunares. De vez en vez salen del horno con uno o dos puntos coquetos en sus extremos. Hubo una atrevida que lo llevaba en el centro, orgullosa de portar la marca que la especie que llena la casa de recordatorios invernales había dejado. El detalle de los lunares no es baladí, francamente hay muy pocas galletas que se atreven a mostrarlos después de pasar por el calor. Las mías no son así, las mías tienen, cada una, una diferencia, las mías son únicas entre sí, las mías son arrogante a veces, y muchas otras necias y lentas, pero al fin y al cabo son invernales, frías por fuera y cálidas por dentro. Y, ahora, tienen lunares con olor a clavo y nuez moscada. 

3 comments:

Anonymous said...

Dignas "criaturitas" hijas de su creadora, aromáticas, traviesas, coqueteando sus lunares.

Un beso, Yo.

Anonymous said...

que razón tiene el que dijo que aqui hay algo porno...

Meruti Mellosa said...

Aquí no hay nada porno (o eso espero), sino delicatessen para toda la familia.