Wednesday, December 30, 2009

Y así termina

1. Clases de baile de primera clase, Robert Jeantal es quien tuvo la idea.
2. Desde el balcón vimos el mar, rabioso rugía emocionado; tratando de alcanzarnos.
3. En el cielo nos dimos cuenta de que no fuimos los únicos que llenaban sus copas con las estrellas de colores que caían del cielo, algunas para alcanzar el mar lentamente, silbando y festejando. La Luna también también cenó sonrisas.
4. Luego de largas miradas cierro los ojos, siento todo una vez más, lo saboreo, lo disfruto y, finalmente, lo dejo ir. Llena de gusto espero, desdoblada, lo que viene.

Tuesday, December 22, 2009

She's back

-¿Ya se fueron?
"Creo que sí, no veo ninguna"
-¿Abrimos ya?- extremadamente ansiosa.
"¿Estás lista?"
- Sí.
"¿Segura? Para que funcione debes estarlo por completo."
-Sí, lo estoy. ¡Abre!

Y muy lentamente fue entrando la luz blanca otra vez, la puerta rechinaba de alegría y la niña dio un paso al frente. De la mano de Kube. Sonriendo secó una lágrima tan dulce que parecía miel cristalina y volvió la claridad.

Primera de Brucilla y Kube, luego de tiempo reparando en la oscuridad.

Wednesday, December 09, 2009

Baladí

Ya hubo Crème Brûlée, ya hubo crepas de todos estilos, ya hubo postres y también una que otra delicia salada, y ahora llega el invierno y la cocina se llena de clavo y nuez moscada. Lo que sigue son cientos estrellas bien horneadas. Astros no tan pequeños y de color bronceado, unas más que otras. Lo que llama la atención es que, a pesar de la vainilla, no ha habido ni una sola peca, lo que hay ahora son lunares. De vez en vez salen del horno con uno o dos puntos coquetos en sus extremos. Hubo una atrevida que lo llevaba en el centro, orgullosa de portar la marca que la especie que llena la casa de recordatorios invernales había dejado. El detalle de los lunares no es baladí, francamente hay muy pocas galletas que se atreven a mostrarlos después de pasar por el calor. Las mías no son así, las mías tienen, cada una, una diferencia, las mías son únicas entre sí, las mías son arrogante a veces, y muchas otras necias y lentas, pero al fin y al cabo son invernales, frías por fuera y cálidas por dentro. Y, ahora, tienen lunares con olor a clavo y nuez moscada.